Estados Unidos/ Redacción:
Antes de perpetrar el horrible ataque en un colegio religioso de Nashville, Audrey Hale, que se identificaba con el género masculino, envió un mensaje a una de sus amigas, en el que apuntaba que estaba planeando morir, además de decirle que probablemente oiría de ella en las noticias.
El joven, de 28 años de edad, quien había cambiado al nombre masculino de Aiden, envió ese mensaje a su conocida, Averianna Patton, que al sentirse preocupada por lo que Aiden le había dicho, llamó a la policía, solo que, esta no hizo caso, hasta 5 horas después, cuando el tirador ya había atacado la escuela.
«Estoy planeando morir hoy. ESTO NO ES UNA BROMA», le escribió Audrey a Averianna. «Probablemente escucharás sobre mí en las noticias después de que muera. Este es mi último adiós. Te quiero. Nos vemos en otra vida. Audrey (Aiden)».
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Pese a que la mujer que recibió los escalofriantes mensajes intentó convencer a el sujeto de que tenía la posibilidad de una vida grandiosa, esto no causó ningún efecto en el asesino, quien le respondió que ya lo sabía, pero que necesitaba morir.
“No intento molestarte o llamar tu atención. Solo necesito Morir”, le dijo.
“Quería decírtelo primero porque tú eres la persona más hermosa que he visto y conocido en toda mi vida. Mi familia no sabe lo que estoy por hacer”, prosiguió.
“Un día, esto tendrá más sentido. Dejé evidencia más que suficiente”, escribió Aiden.
Después de la charla, el tirador tomó sus cosas y fue hacia la escuela, abrió una puerta con un disparo y entró. Con el rifle y una pistola de 9 milímetros en su cinto, accedió al segundo piso, en donde le quitó la vida a tres adultos y tres niños de 9 años de edad.
Finalmente, la atacante fue abatida por los agentes de la policía.